Ricardo Salim define a “Tartufo” como la historia de “quienes gozan de la más absoluta impunidad a través del poder, la mentira, la falsa moral, las apariencias y la hipocresía, que es el tema principal de esta comedia de Molière”.

La clásica obra será estrenada esta noche, a las 21.30, en la Sociedad Francesa de Tucumán (San Juan 750), en una versión libre escrita y dirigida por Salim, para conmemorar el 35° aniversario de la Fundación Teatro Universitario. El elenco está integrado por Jorge García, Sergio de Filippo, Manina Aguirre, Sandra Virgolini, María José Manzur, Juan José Soria, Rodrigo Palacios, Liliana Sánchez, Mauricio Varela y Patricia Cudugnello, con asistencia de dirección de Gustavo Fagioli. Tiene el auspicio del Ente Cultural de Tucumán.

En los hechos, Jean Baptiste Poquelín, el nombre real de Molière, tuvo íntimo contacto con lo más encumbrado del poder de su época. Nombrado por el Rey responsable de los entretenimientos de la corte en 1665, colabora con el músico y compositor Jean-Baptiste Lully en diversas comedias, y en la última década de su vida produjo sus obras teatrales más conocidas.

“Presentamos al protagonista como un ‘sanador espiritual’, que con su astucia seduce a Orgón, un comerciante rico, para despojarlo de sus bienes. Su verdadera naturaleza es la de un hipócrita y un manipulador, que logra el poder, la riqueza y control total sobre la familia de su víctima”, describe el director en diálogo con LA GACETA.

- ¿Nos cruzamos habitualmente con distintos Tartufo en nuestras vidas?

- Estos personajes conviven con nosotros a diario. Utilizan su capacidad para convencer y dominar a sus seguidores, con una falsa máscara de virtud. En realidad, son saqueadores que pretenden obtener bienes materiales y perpetrarse en el poder. Molière desarrolla en esta obra el tema de las máscaras, que cubren identidades y esconden sus faltas. Por eso nos dice: “¡Nada reprende mejor a los hombres, que la descripción de sus faltas! ¡Quien peca en silencio, no peca, es el escándalo lo que vuelve pecaminosa la acción!”

"Tartufo" se llevó el reconocimiento mayor

- ¿Cómo encaraste esta versión propia?

- La realicé este año en una versión libre que se basa en ideas tomadas de ese texto reconstruido, que nos permite describir, con algunos toques personales, el mundo que nos rodea. Explora temas como la hipocresía, el engaño y el conflicto entre la apariencia y la realidad. Luego de su estreno fue censurada por la clase política de la época, y luego de reescribirla, Molière la volvió a presentar. Esta es la versión que llegó hasta nuestros días. Pero en los últimos años investigadores de Francia, a partir de documentos existentes, lograron reconstruir el manuscrito original, que es mucho más crítico que la versión conocida.

- ¿Cómo definís a un hipócrita?

- La palabra viene del griego hypokrités, originalmente significaba “actor” o “el que representa un papel”, lo cual refleja bien la idea de fingir o aparentar. Es una persona que finge tener creencias, sentimientos, valores o cualidades que en realidad no practica o no posee. Aparenta ser de una manera (moral, sincera, justa o piadosa) pero actúa de forma contraria a lo que predica. La hipocresía suele tener motivaciones detrás, y no siempre conscientes. Algunas de estas razones son proteger la propia imagen; evitar el rechazo o la crítica; obtener beneficios materiales o por conveniencia social. Encontramos a los hipócritas en el trabajo, en la amistad, en la religión, y especialmente en la política.

- ¿Cómo se lo desenmascara?

- Las señales típicas para detectar la hipocresía en los demás son el doble discurso; conductas cambiantes según el público; exceso de virtuosismo aparente; personas que exigen lo que no practican; falta de coherencia entre discurso y hechos. El espectador podrá identificar en esta puesta, a partir de las características mencionadas, los Tartufos conocidos de la vida cotidiana.

- ¿La puesta es de época o la actualizaste?

- La puesta está realizada con lenguaje actual, pero los actores visten ropa y maquillaje de época. Esto nos permite presentar esta obra en un marco visual con mayor teatralidad.